Bulgaria arresta a cinco traficantes de personas después de que se encontrara un camión con dieciocho inmigrantes muertos cerca de Sofía.
La oficina del fiscal búlgara abrió un caso sobre el hecho de la muerte de personas contra seis ciudadanos de Bulgaria. Un camión con inmigrantes afganos muertos fue encontrado en un camino de tierra cerca de la capital búlgara, cerca del pueblo de Lokorsko. Los transeúntes encontraron un camión abandonado a 20 kilómetros de Sofía y lo denunciaron a la policía. Había 52 refugiados en el camión que se escondían detrás de montones de leña. Dieciocho de ellos murieron entre 8 y 10 horas antes del descubrimiento del camión: se asfixiaron. Según algunos informes, entre los muertos había un niño de 6-7 años, según otros, la víctima más joven era un adolescente.
La investigación preliminar mostró, como dijo a los medios el fiscal adjunto, jefe del Servicio Nacional de Investigación Borislav Sharafov, que los migrantes golpearon la pared de la cabina del conductor durante mucho tiempo para que detuviera el automóvil, pero este no reaccionó y continuó moviéndose.
Según explicó el fiscal, 18 afganos murieron por falta de oxígeno en un camión cerrado, que iba lleno de ellos, “como sardinas en lata”. Él dijo:
“Las víctimas morían lenta y dolorosamente. Este caso demuestra una crueldad extrema y muestra que los migrantes son tratados como una mercancía que necesita ser transportada de un lugar a otro, ya sea que estén vivos o muertos”.
Los 34 migrantes sobrevivientes fueron hospitalizados, su condición es estable. Estaban empapados y fríos y aparentemente no habían comido en días. Cinco acusados fueron detenidos, contra el sexto, que logró salir del país, se emitió una orden de captura europea.
Según la oficina del fiscal, la red criminal transportó a los migrantes desde la frontera con Turquía a Serbia, desde donde continuaron su camino hacia sus destinos: Alemania, Gran Bretaña, Francia. El líder del grupo criminal fue sentenciado previamente a cinco meses por trata de personas (condicionalmente). Mudarse a Europa no era barato para cada migrante: pagaban a los traficantes 7.000 euros cada uno. El transporte se realizó al menos dos veces al mes, en cada grupo de migrantes había al menos 25-35 personas.
En Bulgaria, la tragedia causó conmoción como una de las más grandes de su tipo. Miles de personas que tratan de escapar de la guerra y la pobreza en el Medio Oriente, África y Asia eligen este camino, y Bulgaria se enfrentó a un aumento significativo en los flujos migratorios desde la vecina Turquía el año pasado. escribe CNN Grecia. Según el Ministerio del Interior de Bulgaria, el año pasado los guardias fronterizos búlgaros detuvieron 164.000 intentos de cruzar ilegalmente la frontera. Un año antes, el número de cruces ilegales evitados era de 55.000.
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