Los cristianos ortodoxos de todos los países celebran la Pascua, un poco diferente, pero con la misma alegría y esperanza.
En Estambul, en un servicio festivo, el patriarca ecuménico Bartolomé pidió el fin inmediato de la guerra en Ucrania y en todo el mundo.
En Grecia, por primera vez en dos años, los fieles pueden celebrar su día más importante sin restricciones por el coronavirus. En Atenas, los representantes de la diáspora ucraniana se reúnen en la Iglesia de la Santísima Trinidad desde hace más de 20 años. Hoy, los refugiados ucranianos rezan aquí lejos de sus familias. Un refugiado de la ciudad ucraniana de Irpen dice:
«Esta es una gran tradición en mi familia, nos reunimos alrededor de la mesa para la Pascua, pero, desafortunadamente, este año se ha desarrollado la situación de que mis padres celebran la fiesta en Ucrania y estoy aquí solo».
Los cristianos coptos egipcios también celebran la Pascua. En 2017, un doble atentado terrorista durante el culto acabó con la vida de decenas de cristianos, por lo que se han incrementado las medidas de seguridad en el país.
En Ramallah, las iglesias ortodoxas celebraron el «Sábado de la Luz»: se encontraron con el Fuego Sagrado que llegó de Jerusalén. En la ciudad, dice euronoticiasse llevó a cabo una procesión de exploradores acompañados por los sonidos de la música nacional y religiosa.
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