Ayer, 11 de agosto, se llevó a cabo una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, convocada a iniciativa de Rusia sobre la situación en la ZNPP.
El titular de la OIEA advirtió en su intervención que aunque por el momento no hay peligro inmediato por el bombardeo de la central nuclear de Zaporozhye, la situación puede cambiar en cualquier momento. Rafael Grossi instó a Rusia y Ucrania a cooperar con el OIEA y permitir que expertos competentes visiten la planta de energía nuclear más grande de Europa lo antes posible. El jefe de la organización dijo:
Sigo muy preocupado por la situación en la planta de energía nuclear de Zaporozhye y reitero que cualquier hostilidad que ponga en peligro la seguridad nuclear debe detenerse de inmediato. Estas acciones militares, queridos colegas, cerca de una instalación nuclear tan grande, pueden tener consecuencias muy graves.
Durante la reunión, Ucrania y Rusia intercambiaron acusaciones mutuas sobre el bombardeo, que representa un peligro real para la central nuclear de Zaporozhye. Vasily Nebenzya, Representante Permanente de Rusia ante la ONU, dijo:
Lo que está ocurriendo estos días en la ZNPP es la culminación de las acciones criminales del régimen de Kyiv contra la infraestructura nuclear y el personal que da servicio a estas instalaciones, que durante meses permaneció sin reacción internacional.
A su vez, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, declaró:
Rusia ha vuelto a «perforar el fondo» de la historia del terrorismo mundial. Nadie más usó tan claramente una planta de energía nuclear para amenazar al mundo entero, presentando algunas condiciones. El mundo entero debe reaccionar de inmediato y expulsar a los invasores del territorio de la central nuclear de Zaporozhye.
En la víspera de la reunión, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo que cualquier posible daño a Zaporozhye u otra planta de energía nuclear en Ucrania podría tener consecuencias catastróficas. Sugirió crear una zona desmilitarizada alrededor de la ZNPP y explicó que «la instalación no debe usarse como parte de ninguna operación militar».
A su vez, Amnistía Internacional reaccionó ante la situación con el ZNPP. La organización pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que responsabilice a Rusia por la militarización de la planta de energía nuclear de Zaporozhye. En una declaración de la secretaria general de AI, Agnès Callamard, publicada en el sitio web de la organizacióndice:
El peligro inmediato que representa la militarización de la central nuclear de Zaporozhye es un tema clave para el Consejo de Seguridad. Esta militarización parece ser parte de una estrategia más amplia de las fuerzas rusas para amenazar a los civiles y poner en grave riesgo a millones de personas. No debemos permitir que las autoridades rusas eludan su responsabilidad. Las declaraciones que recibimos directamente de Energodar, ciudad aledaña a la planta nuclear, hablan con elocuencia del terrible impacto que tiene sobre la población civil la militarización de la planta y territorios aledaños.
Agregó que Amnistía Internacional ahora está investigando estos «informes alarmantes» e instó al Consejo de Seguridad a hacer lo mismo».
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