Nuevo/Antiguo presidente de Francia celebrando la victoria

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha sido reelegido para un segundo mandato y ayer pronunció un discurso triunfal en el Campo de Marte, al pie de la Torre Eiffel.

Habiendo obtenido la mayoría absoluta de los votos (58,5%), Macron seguirá siendo el propietario del Palacio del Elíseo durante otros 5 años. En su discurso, reconoció, sin embargo, que muchos votaron por él solo para evitar que la extrema derecha tomara el poder:

«Finalmente, pienso en los que votaron por la Sra. Le Pen. Sé que están molestos esta noche. ¡No, no abucheen a nadie! Desde el principio les pedí que no abuchearan a nadie. Porque a partir de ahora ya no soy candidato uno de los campos, soy el presidente de todos y cada uno».

El jefe de la «Asociación Nacional» Marine Le Pen admitió la derrota, pero no felicitó al oponente. Llamó a su resultado «una victoria rotunda»: en la segunda vuelta fue apoyada por más del 41% de los votantes, un 7% más que en 2017.

«Más del 43% de los votos (resultado preliminar, nota del editor) es una victoria rotunda en sí misma. Esta noche comenzamos la gran batalla por la legislatura. La lideraré con Jordan Bordella y con todos los que tuvieron el coraje de resistir a Emmanuel Macron en la segunda vuelta, con todos los que tienen a nuestro país en el corazón».

Las elecciones parlamentarias se llevarán a cabo en el país en junio. Algunos periodistas franceses las llaman «la tercera vuelta de las elecciones presidenciales». Será difícil que los partidos de ambos candidatos obtengan una mayoría en la Asamblea Nacional, especialmente dada la creciente apatía política de los franceses: la participación en las elecciones presidenciales ha alcanzado un mínimo histórico en los últimos 20 años. Casi un tercio de los votantes no acudió a los colegios electorales.

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