La publicación griega protothema.gr contó la trágica historia de vida de una niña de Rumania, diciendo que miles de jóvenes del antiguo bloque del Este fueron encerradas en apartamentos británicos.
Elena, de 19 años, de Rumania, buscaba una vida mejor en Europa. Conoció al británico Brian en Internet. Después de un tiempo, la niña pensó que él era su «novio». Y cuando él la invitó a venir al Reino Unido, ella, sin dudarlo, accedió.
El desenlace de la «aventura romántica» fue terrible. El traficante de esclavos (quien era en realidad, buscando víctimas en Internet) la encerró en un apartamento de West Midlands y la obligó a tener relaciones sexuales con 20 o más hombres al día.
La víctima de violencia sexual fue torturada, quemada con cigarrillos, golpeada sin piedad. Cuando la policía la encontró, estaba medio muerta y sangraba profusamente. Los médicos del hospital no le dieron más de 48 horas de vida, su estado de salud era tan terrible.
Su historia es la del documental de dos horas de la BBC The Sex Slaves Next Door, sobre miles de ex niñas del bloque del Este que están atrapadas en apartamentos en toda Europa y se convierten en víctimas del tráfico sexual.
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